La escritura aljamiada ocupa un importante capítulo dentro del marco de las literaturas marginadas. Es una de las últimas manifestaciones de una cultura maltrecha, prohibida y tremendamente admirada a la vez por un poder dominante y fanatizado, en un período histórico en el que la intolerancia cristiana iniciaba, a través de un abierto rechazo hacia las comunidades étnico-religiosas con las que con mayor o menor acercamiento había convivido en otras épocas, un camino de ascendente crueldad que habría de desembocar más tarde en la mordaz y despiadada Inquisición, extraordinaria máquina represiva que sembró el terror y afectó esencialmente a las actividades más fundamentales durante largos siglos en la España de la época. Seguir leyendo
Categoría: Bitácora (Página 5 de 5)
Ya Voltaire en su tiempo gustaba deleitarse muy a menudo en sondeos que lo movían por los entresijos de lo divino y de lo humano. Y dentro de esto último, aunque entre lo uno y lo otro haya una estrecha conexión, dedicó algunas páginas de su obra a todo lo relacionado con la fisiología, a aquellos problemas que, por acompañar diariamente a los humanos, solo podían ser resueltos en un anodino y reducido lugar llamado excusado. Realmente, el retrete siempre ha guardado un especial parecido con las salas para el cultivo del espíritu, como llamaban los orientales a sus bibliotecas. En cualquier época, ambos lugares han llegado a ser determinantes en la vida de los que han dedicado su tiempo a regir los destinos de los hombres.